La colonoscopia consiste en la inserción de una sonda flexible a través del recto para el estudio del intestino grueso. La cámara acoplada en el extremo de la sonda permite la visualización del colon y la detección de lesiones. La exploración se realiza bajo sedación.

Es necesario realizar una limpieza intestinal previa a la colonoscopia. Consiste en la realización de una dieta sin residuos y la toma, horas antes, de un preparado evacuante que elimina los residuos restantes y permite explorar correctamente el colon. Todo paciente que va a someterse a esta exploración es debidamente informado del método de preparación el día que acude a consulta para programar la colonoscopia.

Las indicaciones más habituales de la colonoscopia son: la detección y tratamiento de lesiones precancerosas (pólipos) como prevención del cáncer de colon, investigación de sangrados digestivos, diagnóstico y seguimiento de pacientes con enfermedad inflamatoria intestinal, entre otras. Si es preciso, durante la exploración pueden extirparse las lesiones detectadas, tomar biopsias o tratar sangrados digestivos en el mismo proceso.

La gastroscopia consiste en la inserción de una sonda flexible a través de la boca para la exploración del tracto digestivo superior: esófago, estómago y duodeno. Mediante esta exploración es posible investigar síntomas, tomar biopsias y/o tratar lesiones detectadas. La exploración se realiza bajo sedación.

La preparación previa para esta prueba precisa únicamente mantener unas horas de ayuno antes de su realización, y en ocasiones la retirada de algunos tipos de medicamentos. Estas indicaciones serán expuestas en la consulta donde se indica la exploración.

La ecoendoscopia (Ultrasonografía Endoscópica) se utiliza para la evaluación de diversas enfermedades del tubo digestivo y de los órganos adyacentes. El tubo que se inserta incorpora una sonda que genera imágenes por ultrasonidos (ecografía). Estas imágenes permiten examinar detenidamente el páncreas, la vesícula y sus conductos, el hígado, los ganglios linfáticos y los pulmones. Gracias a su exactitud es posible determinar el grado de afectación de tumores en la zona donde se desarrollan (principalmente esófago, estómago, páncreas, recto y algunos tipos de cáncer pulmonar) y el alcance en órganos de alrededor. La exploración se realiza bajo sedación.

Este procedimiento permite tomar muestras de lesiones detectadas introduciendo una aguja a través del tracto digestivo con control ecográfico. Esto se denomina “Ecoendoscopia con Punción-Aspiración con Aguja Fina (PAAF) o Biopsia con Aguja Gruesa (BAG)”. Las muestras tomadas son analizadas por el servicio de Anatomía Patológica para completar el diagnóstico.

La ecoendoscopia es la prueba más específica para la detección y estudio de lesiones en el páncreas. Clínica Rotger es el centro de referencia para su realización en la red asistencial de Quirónsalud en Islas Baleares.

La CPRE (ColangioPancreatografía Retrógrada Endoscópica) es un tipo de endoscopia usada para tratar obstrucciones en los conductos biliares y/o pancreáticos. Consiste en la introducción de una sonda flexible por la boca hasta la zona intestinal donde desembocan estos conductos (papila) en el duodeno. A través de la papila se puede introducir instrumental para extraer piedras (litiasis) que obstruyen los conductos y/o colocar prótesis para permitir la circulación de bilis y jugos pancreáticos hacia el duodeno, sin necesidad de cicatrices externas ni drenajes a través de la piel. Esta exploración se realiza bajo sedación.

La manipulación de esta zona anatómica requiere al menos 24 horas de vigilancia hospitalaria tras su realización. La preparación previa es sencilla, precisando únicamente ayunas horas antes y retirada de algunos fármacos que pueden interferir en la realización de la prueba.

Las indicaciones más habituales de este procedimiento son la presencia de coledocolitiasis (piedras formadas en la vesícula que han escapado al conducto colédoco y lo han obstruido), procesos inflamatorios agudos o crónicos del páncreas (pancreatitis) y obstrucción de los conductos por diferentes tumores (cáncer de páncreas, colangiocarcinoma, ampuloma)

Consiste en la extirpación de lesiones con potencial maligno que crecen en algunas zonas del aparato digestivo. Supone una alternativa a la cirugía para eliminar lesiones grandes (pólipos) cuando aún tienen un comportamiento benigno, manteniendo la integridad del órgano en cuestión. Se aplica principalmente para eliminar lesiones en colon y en recto, aunque también es posible su realización en esófago, estómago y duodeno.

Dependiendo de la localización de la lesión, se accederá a través de la boca o del ano para realizar la extirpación, utilizando un material específico para ello. Todo el procedimiento se realiza bajo sedación. Se trata de una técnica muy segura y eficaz cuando se aplica sobre lesiones que cumplen todas las características para que el procedimiento sea un éxito.

En Clínica Rotger estos procedimientos son realizados por personal experto tanto en la selección de lesiones como en su extirpación completa y segura, permitiendo al paciente ser dado de alta tras la finalización del proceso.